Hace sólo algunos días, el 06 de abril del 2021 para ser más exacto, se ha publicado la Resolución Exenta 2076, sobre el desarrollo de la Orientación Educacional en el Sistema Escolar. Esto constituye un hecho extraordinariamente importante, convirtiéndose en un hito en el reposicionamiento de la orientación y, en consecuencia, del rol de liderazgo técnico de orientadoras y orientadores de Chile.

Para nuestra ATE y Consultora Gestión y Red en Educación y Cultura, representa un particular orgullo ya que nuestro Director Académico, don Rafael Andaur Troncoso, formó parte de la mesa de trabajo de las propuestas de esta normativa.

La Orientación en Chile se debe posicionar como un eje esencial de la gestión de una institución escolar, a partir de la cual se generan las directrices fundamentales y coordinación de todas las áreas de gestión de un establecimiento, por lo que requiere de profesionales capacitados y con una visión panorámica de lo que debe ser la formación integral de nuestros alumnos y alumnas, de tal manera que ilumine la planificación y dirección de la organización. Esto es lo que viene a regular y actualizar este nuevo decreto recién publicado y en muy buena hora, dado el contexto nacional y mundial, de indesmentible crisis de todo orden, que nos exige a los educadores, y en particular a los orientadores,  hacer un alto y reflexionar profundamente en los enfoques educativos que requieren los tiempos modernos, con el fin formar personas con las herramientas cognitivas, emocionales, espirituales y valóricas necesarias  y adecuadas para contribuir al bienestar integral de la sociedad y con ello hacer de nuestro país y el mundo un lugar donde se pueda lograr un buen vivir para todas las personas. 

Desafortunadamente, en algunas instituciones escolares, se ha desconocido el importante rol del Orientador, no asignándoles la cabida en los ámbitos de gestión correspondiente, reemplazándolos por otros profesionales que no siempre cuentan con una formación en el ámbito de la pedagogía u Orientación Educacional. 

Esperamos que a partir de la entrada en vigor de esta normativa se corrijan estos aspectos que debilitan los servicios educativos que ofrece cada una de las instituciones educativas de nuestro país, a través de sus Proyectos Educativos Institucionales, tanto de la educación pública, particular subvencionada y particular pagada, refundando con ello una sociedad más justa y equitativa.